Guía completa sobre los tipos de plástico, su historia y el significado de los números en los envases
El plástico es uno de los materiales más utilizados en la industria y la vida cotidiana. Desde envases de alimentos hasta componentes electrónicos, este material ha transformado la manera en que vivimos.
Sin embargo, no todos los plásticos son iguales, y su composición influye en su uso, su capacidad de reciclaje y su impacto ambiental.
Para comprender mejor cómo manejar este material, es fundamental conocer los diferentes tipos de plásticos y el significado de los números que acompañan los envases, los cuales indican el tipo de material del que están hechos y cómo deben ser gestionados.
Al identificar el tipo de plástico, podrá saber cuáles son reciclables y cuáles de preferencia evitar, fomentando así un consumo más consciente y sostenible.
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En este artículo le explicamos los tipos de plástico, el significado de los números de reciclaje y los productos que se fabrican con cada uno. Desde el más común PET, hasta los plásticos más complejos como el número 7.
Tipos de plástico según su numeración
Los envases de plástico llevan un número dentro de un triángulo de reciclaje, el cual indica el tipo de material y su capacidad de ser reutilizado. A continuación, le presentamos los siete tipos de plástico más comunes:
PET (Tereftalato de polietileno) – Número 1
Es el más común en botellas de agua y refrescos. Es reciclable, pero no se recomienda reutilizarlo muchas veces, ya que puede liberar sustancias tóxicas con el tiempo.
Usos comunes: botellas de bebidas, envases de alimentos y textiles sintéticos.
HDPE (Polietileno de alta densidad) – Número 2
Es un plástico resistente y seguro, ampliamente utilizado en envases de productos de limpieza y leche.
Usos comunes: botellas de detergente, envases de champú y tuberías.
Reciclable: sí, en la mayoría de los programas de reciclaje.
PVC (Policloruro de vinilo) – Número 3
Este material es versátil, pero contiene aditivos tóxicos. Se usa en tuberías, juguetes y cortinas de baño.
Usos comunes: tarjetas bancarias, cables eléctricos y revestimientos.
Reciclabilidad: limitada, debido a sus componentes tóxicos.
LDPE (Polietileno de baja densidad) – Número 4
Es flexible y liviano, utilizado en bolsas de plástico y envolturas de alimentos.
Usos comunes: bolsas de supermercado, papel film y envases flexibles.
Reciclabilidad: baja, aunque en algunos países se recicla en pequeñas cantidades.
PP (Polipropileno) – Número 5
Es un material resistente al calor y a los productos químicos.
Usos comunes: envases de yogur, tapas de botellas y utensilios de cocina.
Reciclable: sí, pero no en todos los centros de reciclaje.
PS (Poliestireno) – Número 6
Conocido como unicel o espuma de poliestireno, se usa en envases de comida y vasos desechables. Su reciclaje es difícil.
Usos comunes: bandejas de carne, vasos de café y material de embalaje.
Reciclabilidad: muy baja, se recomienda evitar su uso.
Otros plásticos – Número 7
Este grupo incluye plásticos de uso especial, como el policarbonato, que puede contener bisfenol A (BPA), un químico potencialmente nocivo.
Usos comunes: biberones, lentes de sol y componentes electrónicos.
Reciclabilidad: limitada y depende del tipo específico de plástico.
La imagen muestra los tipos de plástico, su clasificación y los productos que comúnmente se fabrican con ellos. (Foto: Prensa Libre, plastica.com)
Optar por materiales reciclables y reutilizables puede reducir el impacto ambiental y fomentar un consumo más responsable. Al identificar los números en los envases, puede saber cuáles se pueden reciclar y cuales podrían ser de mayor riesgo para su salud.
Cinco momentos de la historia del Plástico: De innovación a desafíos ambientales
Según un estudio del Laboratorio de Nanotecnología del Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Gavidia de El Salvador, estos son los momentos más relevantes de su evolución:
Orígenes (1860s):
El viaje del plástico comenzó con la invención de la goma vulcanizada por Charles Goodyear en 1839, pero fue en 1907 cuando el químico estadounidense Leo Baekeland desarrolló la baquelita, el primer plástico completamente sintético, lo que permitió la creación de productos más duraderos y resistentes al calor.
Introducción de la Celuloide (1856)
En 1856, el celuloide, derivada de la celulosa, abrió nuevos horizontes. Este material sustituyó al marfil en la fabricación de bolas de billar y, con el tiempo, se utilizó en productos como juguetes, utensilios y más.
Avance y Comercialización (1900-1950):
La creación de la baquelita marcó el inicio de la expansión del plástico. Su versatilidad impulsó su adopción en la electrónica, productos domésticos y en la industria bélica durante la Segunda Guerra Mundial, donde se utilizó en todo, desde componentes de aviones hasta uniformes.
Crecimiento Exponencial (1950s-2000s)
La década de 1950 vio la introducción de nuevos plásticos como el polietileno y el PVC, lo que consolidó al plástico como material esencial en la vida cotidiana. En el 2014, la producción mundial alcanzó 299 millones de toneladas, evidenciando su omnipresencia en envases, productos automotrices y más.
Desafíos ambientales y regulaciones (Desde 2000)
Con el aumento en la producción y uso del plástico, surgieron problemas ambientales, como la contaminación por plásticos y micro plásticos. Este impacto global ha impulsado esfuerzos para regular el uso del plástico y desarrollar alternativas más sostenibles.
Según un estudio de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Rafael Landívar, del año 2009, si se analiza el consumo de envases desechables, específicamente para agua pura, los datos son alarmantes. En Estados Unidos, en el 2004, se consumieron 28 mil millones de botellas, todas fabricadas con PET.
y a pesar de que se ha impulsado un reciclaje acelerado, según explica el artículo, este proceso sigue siendo solo una pequeña fracción de la producción total. Ante esto, surge una pregunta importante: ¿dónde están todas estas botellas? La respuesta es preocupante: la mayoría termina en vertederos, contribuyendo a la creciente crisis de residuos plásticos.
Es crucial entender los tipos de plástico y sus números para tomar decisiones informadas sobre su uso y reciclaje. Más aún, al hacerlo, contribuimos al cuidado del medio ambiente, y una manera efectiva de lograrlo es ser conscientes de nuestra huella ecológica, mejorando no solo nuestros hábitos de consumo, sino también nuestra forma de manejar los desechos.