¿Por qué al cirujano Kevin Malouf le redujeron la sentencia por homicidio culposo?
Floridalma Roque vivía en Estados Unidos y, según los registros migratorios, ingresó a Guatemala el 3 de junio de 2023 en un vuelo que llegó al Aeropuerto Internacional La Aurora, procedente de Honduras. El motivo del viaje era someterse a una cirugía estética en la clínica de Kevin Malouf el 13 de junio de ese año.
Su viaje a Guatemala no tuvo retorno. Según las investigaciones del MP, el cirujano, junto a tres de sus colaboradores, simuló que Roque estaba viva mientras su cadáver era mutilado y enterrado en una finca en Escuintla.
La tesis del MP y del Instituto de la Víctima apunta a que Malouf cometió un homicidio y no homicidio culposo.
El MP argumentó que el cirujano actuó con dolo eventual, pues no procuró salvar la vida de Roque.
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Juan Carlos Aquil, abogado del Instituto de la Víctima y querellante en el caso, explicó que el enfermero Luis Castro declaró cómo Malouf no le aplicó la insulina a la paciente, no le brindó los primeros auxilios ni la trasladó a un sanatorio, a pesar de las recomendaciones. Posteriormente, el médico desmembró el cuerpo y lo hizo desaparecer.
Agregó que el ente investigador indicó que el cirujano no actuó de forma errada, sino que fue un acto consciente de las acciones que provocarían la muerte de Floridalma Roque. Según el MP, los hechos encuadran en el delito de homicidio.
Además, Castro expuso durante su declaración que Malouf ya tenía un “plan” ante las posibles complicaciones de salud de sus pacientes.
“A él —Malouf— dos días antes lo visitó el Ministerio Público, porque en ese momento estaba siendo investigado por la muerte de una mujer originaria de Petén, presuntamente su paciente”, indicó el abogado.
El Instituto de la Víctima argumentó ante el juez que Malouf cometió homicidio al evitar prestarle atención médica a Roque cuando lo necesitaba.
“La ley establece que hay delito de acción por omisión y que hay personas que tienen una posición de garante ante la sociedad”, aseguró Aquil.
Explicó que, al someterse a una cirugía, el paciente acepta que hay riesgo durante la intervención, pero el profesional debe hacer todo lo humanamente posible para salvarle la vida en todo momento.
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“Cuando vemos las acciones del doctor Malouf, en ningún momento procura salvarle la vida a Floridalma Roque. Al contrario, él sabía como médico que, si no le brindaba auxilio, ella podía morir, y muere”, indicó.
El abogado señaló que Roque necesitó insulina para ser estabilizada durante la cirugía, pero se la aplicaron al menos siete horas después.
“Para nosotros no hay negligencia ni imprudencia, sino un homicidio por omisión. Él —Malouf— tenía el mandato legal de actuar para salvarle la vida”, enfatizó.
A pesar de los argumentos del Instituto de la Víctima y del MP, el juez Pedro Laínez modificó el delito a homicidio culposo.
Laínez explicó que la declaración del enfermero Luis Castro no había sido en una audiencia de anticipo de prueba, sino que formaba parte de su defensa. Por lo tanto, el MP no podía determinar en ese momento el dolo o la intención de los acusados contra Roque.
El cirujano plástico Kevin Malouf solo compareció presencialmente ante el juez el día de su captura. Durante todo el proceso, participó por videollamada.
Cadáver mutilado
El enfermero Castro decidió declarar en la sala el 2 de mayo de 2024, durante la etapa intermedia del proceso judicial.
Según relató, tanto él como otras empleadas advirtieron a Malouf que era necesario adquirir insulina y, en los momentos más críticos, que se requería trasladar a la paciente de urgencia a un hospital.
Sin embargo, Malouf se resistió.
“Le decimos al señor Malouf que había que trasladar a la señora Roque y él dice que no, que eso es muy caro, que él no lo va a pagar”, agregó Castro.
“Lamentablemente, la señora Roque nunca despertó y no podría decir hasta el día de hoy cuál fue la causa”, añadió.
Castro reveló que Malouf, él y las otras dos implicadas colocaron el cuerpo en un bote grande con ruedas. Luego expresó una frase que resonó en la sala: “quedó en posición fetal”.
El fiscal le formuló otra pregunta directa:
—¿Puede indicar quiénes ayudaron en ese sentido?
Castro respondió de inmediato:
—Las cuatro personas que estábamos en la clínica.
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A las 23.57 horas del mismo día de la operación, según la fiscalía, Malouf se retiró de su clínica y trasladó los restos de la víctima a su vivienda en Santa Catarina Pinula.
Horas después, Malouf y otras personas coordinaron acciones para desaparecer el cuerpo.
El fiscal detalló que se utilizaron sierras dentadas para fragmentar el cuerpo de Floridalma Roque.
“Después, usted —Malouf— y sus copartícipes convienen en lanzar los restos humanos de su víctima en un área boscosa de San Vicente Pacaya, Escuintla”, explicó.
Los restos humanos fueron localizados el 5 de junio de 2024 en una fosa, a unos 29 kilómetros de la capital.
Según la Fiscalía de Femicidio, Malouf, Susana Rojas, Luis Castro —enfermeros— y Lydia Viviana Silva —anestesióloga— simularon la salida de Roque.
Rojas se sentó en una silla de ruedas y fingió ser la paciente mientras Castro la sacó de la clínica. Luego, la supuesta paciente subió a un taxi y se dirigió a la zona 10, donde descendió del vehículo y se reunió con Malouf.
Condena
Por la aceptación de cargos, este miércoles 5 de marzo, Malouf fue condenado a tres años y cuatro meses de prisión por homicidio culposo; Lydia Silva, a dos años y tres meses por homicidio culposo en grado de tentativa; y Susana Rojas, a tres años por encubrimiento propio.
Los tres sentenciados fueron inhabilitados para ejercer su profesión durante seis años y siete meses.
A esta condena se suma otra del 3 de octubre de 2024, cuando Malouf, Silva y Rojas fueron condenados a dos años de prisión por obstaculización a la acción penal.
Ese mismo día, Castro también recibió otra condena de un mes de prisión por encubrimiento propio.
Apelación de la sentencia
Juan Carlos Aquil, abogado del Instituto de la Víctima, afirmó que están analizando, junto con el MP, presentar una apelación contra la condena de Malouf y las otras dos personas.
Agregó que se opusieron a la aceptación de cargos de los acusados, porque aún estaba pendiente la audiencia de anticipo de prueba del enfermero Luis Castro, lo que habría permitido llevar a juicio a Malouf y los implicados.
Comentó que hay dos amparos pendientes de resolver por una sala y, si se declaran favorables, los acusados podrían enfrentar un juicio por homicidio.
