Tikal limita acceso a una de sus estructuras más visitadas y esto dicen las autoridades
La Administración del Parque Nacional Tikal comunicó este viernes 9 de mayo que el acceso al Templo II estará restringido por tiempo indefinido para los visitantes que arriben al sitio arqueológico.
Las autoridades no precisaron cuánto tiempo permanecerá cerrada esa área, e hicieron un llamado a los turistas para que visiten otros sectores del parque.
“La Administración del Parque Nacional Tikal informa a la población en general que el próximo lunes 12 de mayo se realizarán trabajos de reparación y mantenimiento en el tramo inicial de la escalinata del Templo II. Estas labores tienen como objetivo garantizar la seguridad de todos nuestros visitantes”, señala un comunicado.
Agrega que, durante el proceso, el acceso a esa zona permanecerá temporalmente restringido hasta concluir los trabajos, por lo que los turistas podrán recorrer el resto de espacios de la zona arqueológica.
“La Administración del Parque Nacional Tikal reitera su compromiso con la seguridad y el bienestar de los visitantes, y trabaja de manera continua para ofrecer una experiencia segura y enriquecedora”, añade el documento.
El 22 de abril último, varias publicaciones en redes sociales cuestionaron el estado de la crestería del Templo III, en el Parque Nacional Tikal, debido al supuesto deterioro que la afecta, pese a que se trata de una de las estructuras más emblemáticas del sitio arqueológico de Petén.
Sin embargo, el Ministerio de Cultura y Deportes y la Administración del Parque Nacional Tikal aseguraron que los daños señalados en redes sociales obedecen a procesos de conservación controlada y no al descuido de las autoridades, como se indicó.
“Las imágenes compartidas muestran una perforación realizada en el tercer nivel de la crestería con el propósito de permitir el acceso al interior de la cámara vacía y facilitar las labores de estabilización estructural”, indica un comunicado del Ministerio de Cultura.
Además, señala que las grietas detectadas en la bóveda fueron ocasionadas por el impacto de un rayo que afectó la crestería del Templo III en 2012.